El pasado invierno fue el segundo más cálido desde 1961

GUILLERMO GÜEMES
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La delegada del Gobierno de España en Castilla-La Mancha, Milagros Tolón, junto a la delegada territorial de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Eroteida Sánchez, han presentado el informe sobre el invierno meteorológico en la región

El pasado invierno fue el segundo más cálido desde 1961 - Foto: Rueda Villaverde

La delegada del Gobierno de España en Castilla-La Mancha, Milagros Tolón, junto a la delegada territorial de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Eroteida Sánchez, han presentado el informe sobre el invierno meteorológico en la región 2023-2024 y el avance de la previsión para la primavera 2024.

Según los datos recogidos por la Aemet, el pasado invierno ha sido el segundo más cálido desde 1961, año en el que se comenzaron a registrar datos. El más cálido fue el pasado invierno de 2019-2020.

La temperatura media fue de 7,8 grados en Castilla-La Mancha, siendo los episodios de temperaturas más altos a finales de enero. El primer mes de 2024 fue extremadamente cálido, siendo la media de 8 grados (2,8 por encima de la media). Chinchilla, en Albacete, registró el pico de temperatura más alto de enero.

Pese a que pueda resultar contradictorio, debido a las altas temperaturas, fue un invierno húmedo. La precipitación media fue de 127,1 litros por metro cuadrado. Toledo fue la provincia donde más llovió, siendo el octavo invierno más húmedo del s. XXI.

Durante la estación hubo cuatro borrascas de gran impacto. Irene y Juan, en enero, y Karlotta y Louis, en febrero. Los datos más destacados de estos fenómenos meteorológicos son: Irene dejó 93 kilómetros por hora en Los Llanos (Albacete) el 14 de enero; Juan presentó precipitaciones de 66,4 litros por metro cuadrado en El Robledo (Ciudad Real) el 18 de enero; el 8 de febrero hubo precipitaciones que recogieron 40,8 litros por metro cuadrado en el Pantano el Vado (Guadalajara), debido a Karlotta; y, Louis trajo vientos de 85 kilómetros por hora en Toledo el día 25.

Para la primavera se prevé que sea cálida, cuanto más al sur de Castilla-La Mancha más lo será. Para este año hay una probabilidad cercana al 70% de que así sea. En cuanto a las precipitaciones no se muestra significatividad, por lo que puede ser tanto seca como húmeda.

Desde la Aemet recuerdan que las predicciones se basan en modelos estimatorios. De esta forma, según avancen los días la previsión será más cercana a la realidad y recuerdan a la ciudadanía consultar el tiempo según se acerquen las fechas.