Ayuntamientos y democracia
ángulo invertidos
jesús fuentes
La señora Carmena dijo que «un alcalde no puede ser una persona de partido». Y uno se pregunta, ¿qué la habrá ocurrido a la señora Carmena para una formulación semejante. ¿Tal vez su ego inflado tira más que el poder de las instituciones democráticas? En los Ayuntamientos, base histórica de la democracia, la legitimidad  política se construye con la cercanía de los ciudadanos.  En los Ayuntamientos se ejercita  la democracia concreta de los hechos cotidianos. En los Ayuntamientos se fundamenta  el papel de los partidos políticos, a través de los cuales se articulan las demandas y la representación  ciudadanas.
No es  aconsejable que un alcalde/sa se represente a sí mismo. Qué la gestión de los intereses colectivos dependa de  individuos de aparente ideología neutra. Es el inicio de la autarquía o del populismo simplista. Los Ayuntamientos no son apolíticos, sino la concreción primaria de la política participativa. Cosa distinta es que el alcalde gobierne solo para unos cuantos o para los de su partido. Afortunadamente no suele ser así. La alcaldesa de Toledo, por ejemplo, señora Milagros Tolón, ha gobernado más pendiente de la derecha que de la izquierda. Ha establecido más complicidades con la primera que con la segunda. Su gestión ha sido equilibrada, mirando a casi todos los barrios que forman el mapa disperso de una ciudad que las políticas de derechas construyeron en el pasado. Un ejemplo. Se creó un barrio, en tiempos de un alcalde de derechas, justo al lado de un vertedero. Lo que convirtió a los primeros pobladores del lugar en indómitos guerrilleros que combatieron, hasta el triunfo, el disparate de  un barrio al lado de un vertedero. El mismo alcalde  pretendió sembrar de ladrillo tanto Vega Baja como Peraleda.  
La gestión de la señora Milagros Tolón ha revertido ese proceso. En Vega Baja se trabaja para aflorar los restos que sus tierras se esconden. Seguro, que si vuelve a ser alcaldesa, continuará este trabajo hasta completar el mapa arqueológico de lo que en unos siglos fuera la ciudad de los visigodos. Pero también se ha comprometido con el diseño de una ciudad  verde,  habitable, menos maciza. Y se presenta por un partido  que enraíza sus políticas en la igualdad y bienestar de los ciudadanos sin distinción. Ahora voten a quién representa mejor los intereses de la ciudad.