Lamenta el cambio de criterios para abrir el comercio el día 1

Redacción
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La Asociación de Comercio de Cuenca respeta la decisión del Pleno, aunque desvela que no se ha mantenido la postura expresada en la Comisión de Comercio ni tampoco en las reuniones con los grupos políticos, salvo excepciones

La patronal del sector del comercio de alimentación pidió abrir el día de la Virgen de la Luz. - Foto: Reyes Martínez

La Asociación de Comercio de Cuenca lamenta que se hayan modificado los criterios que se habían expresado en la Comisión Municipal a la hora de habilitar la apertura de los comercios para el próximo 1 de junio.

Del mismo modo desvela que, salvo excepciones, tampoco se ha mantenido la postura expresada por parte de los distintos partidos políticos en las reuniones mantenidas con ellos desde Asucam y la Asociación del Comercio con tal fin.

Igualmente, tampoco acepta las excusas señaladas para votar en contra porque esta postura no había sido mostrada en los distintos encuentros y conversaciones que se habían señalado con anterioridad.

Por todo ello, consideran que han sido las diferentes presiones recibidas tras la publicación de la noticia en medios de comunicación en el fin de semana previo a las votaciones las que han provocado el cambio de postura de parte del equipo de Gobierno y de otros representantes municipales.

Desde la Asociación del Comercio se expresa que en ningún momento se quería menoscabar con esta apertura los derechos del trabajador, sino que se defendía el acuerdo para prestar un servicio a los ciudadanos que se quedan en la ciudad y de acuerdo con los empleados, recordando que sí está permitida apertura de establecimientos con una superficie de venta inferior a 300 metros cuadrados que sean una pequeña o mediana empresa.

Plazos. Desde Asociación del Comercio muestran su disconformidad con las quejas porque se votara en el Pleno en el correspondiente a marzo y no antes, puesto que los contactos con los diferentes grupos políticos ya se establecieron el año anterior cuando se conocía el calendario y la sucesión de festivos.

Por lo tanto, consideran que todos estaban perfectamente informados de esta cuestión y ya habían mostrado un criterio al respecto con mucho tiempo de antelación a la celebración del pleno.