Julia Masthtaler Bichinska es de origen ucraniano y lleva en Cuenca desde hace 23 años. Actualmente reside en Tarancón desde hace doce pero los primeros años estuvo viviendo en Horcajo de Santiago y en Cabezamesada. Como una ucraniana más no concibe lo que está pasando entre «dos pueblos que somos hermanos. No se puede ni pensar lo que está ocurriendo. Está claro que pueden existir discrepancias entre gobiernos, pero no llegar al punto en el que nos encontramos», detalla Masthtaler Bichinska. 

Esta ucraniana tiene dos hijas en Tarancón, pero vive con «mucho miedo» porque tiene familia en Ucrania. Sus padres, que ya tienen una avanzada edad, fueron militares y su hermano también lo es. «Mis padres no pueden ya combatir, pero mi hermano se encuentra en primera línea de batalla para defender a nuestro país», asegura. La propia Julia, que no encuentra razón alguna para lo que está sucediendo, se muestra también voluntaria para acudir a Ucrania y «ayudar en todo lo posible, sé que no tengo conocimientos para usar armas, pero puedo ayudar en aspectos sanitarios como con vendajes a los heridos, como ya están haciendo muchas mujeres en mi país», señala. 

Además, Julia Masthtaler Bichinska expone que este conflicto supone «el cierre de las puertas a Ucrania, pero también se está cerrando las puertas Rusia», afirma. Julia destaca que «los rusos se van a ver también ahogados».