Tarancón estrena hoy su nueva iglesia, dedicada a San Víctor y Santa Corona, copatronos del municipio, en el corazón del barrio del mismo nombre. La segunda Parroquia de la localidad lleva en funcionamiento desde junio de 2011 en el centro parroquial, pero desde esta tarde su actividad se desarrollará en el nuevo templo, con capacidad para unas 500 personas.

La primera piedra del edificio religioso se colocó simbólicamente en 2007, pero las obras comenzaron hace aproximadamente año y medio. Su construcción es un hecho histórico porque la otra iglesia de Tarancón, de Nuestra Señora de la Asunción, data del siglo XVI.

Al parecer en los años 60 del siglo pasado ya se celebraba misa en una nave situada junto a la avenida Miguel de Cervantes, a la altura de la zona conocida hoy como El Cerky. «La necesidad de una segunda parroquia en Tarancón existe desde hace muchos años, se amortiguó un poco con las capillas de la residencia de mayores y el colegio de la Merced, pero siguió en mente», comenta el párroco de la iglesia de San Víctor y Santa Corona, Miguel Ángel Caballero. En época de crisis, con la obra pública y privada prácticamente parada, remarca que «somos de los pocos que hemos dado trabajo, hemos priorizado dar empleo a quién  lo necesita, pero no a modo de limosna, sino a modo de justicia, que es que tengan trabajo».

Con una inversión de alrededor de 1.200.000 euros, el párroco matiza que «no teníamos este dinero y nos lo hemos gastado, sino que lo hemos pedido prestado y hay que devolverlo». Con la creación de la iglesia se ha dado trabajo «a muchas familias de Tarancón que no tenían empleo, albañiles, electricistas, fontaneros, pintores, etcétera, que nos lo han agradecido».

Ante las críticas que apuntan a que es un gasto innecesario, Miguel Ángel Caballero se muestra tajante asegurando que «cuando algunos preguntan cuánto cuesta la iglesia, hay que decirles a tí nada, porque no das nada». Añade que el nuevo templo no se ha pagado con dinero público, «se está pagando con donaciones voluntarias de quien quiera participar y con la ayuda del Obispado de Cuenca, que es en definitiva la ayuda de todos los fieles de la provincia que quieren colaborar».

Como curiosidad

Después de la capital y Los Hinojosos, donde históricamente existen dos parroquias, Tarancón es el único pueblo de Cuenca con dos parroquias con dos párrocos distintos.

Ante las voces que alertan sobre la escasez de fieles en la iglesia de la Asunción, Caballero comenta que «no se puede quedar vacía porque estamos en un pueblo con 18.000 habitantes, lo que hay que hacer es ir, para que no se quede vacía». Al centro parroquial acudían a diario en los últimos años unas 40 personas y los domingos, de media, esta cifra llegaba a multiplicarse hasta por veinte.  

La iglesia de San Víctor y Santa Corona, con un párroco y un vicario parroquial, Germán Jiménez Tirado, que  a su vez es párroco en Zarza de Tajo y Belinchón, cuenta con una estructura exterior, con campanario de 30 metros de altura coronado con una cruz, que simbolizan una barca invertida con su vela. La nave central, con 40 bancos más uno perimetral, tiene dos puertas grandes más una de servicio. En su parte trasera está la capilla del bautismo y la sede penintencial, el acceso al coro, al campanario y a la cripta, donde hay una capilla, que será la que se utilice para las misas diarias, y un salón de usos múltiples el triple que el actual del centro parroquial. Las tres vidrieras del presbiterio resaltan junto con el retablo semicircular y el altar mayor. Destacan el Cristo de la Sangre (antes en la capilla de los Somascos), los copatronos y una nueva Virgen Inmaculada de la Juventud. También se ha trasladado a Santa Marta, la Virgen de la Paz y el Cristo del Amor y las imágenes de la Oración en el Huerto de la Hermandad San Juan.

«Lo principal está, algunas cosas son provisionales, pero iremos poco a poco», resalta Caballero.

A qué hora

La solemne dedicación con motivo de la inauguración del nuevo templo es hoy a las cinco de la tarde, con la presencia del obispo, José María Yanguas, que a la una se reunirá con los grupos parroquiales de esta iglesia, integrados por más de 200 personas. Las misas a partir de este hoy serán a las 9,30 horas a diario, el sábado a las 18,30 horas y el domingo a las 11,30, 13 y 18,30 horas.

El Consistorio estudia una nueva regulación del tráfico

La iglesia de San Víctor y Santa Corona albergará a partir de ahora todos los sacramentos y celebraciones. «En el caso de los entierros o los bautizos, por jurisdicción se indicará qué parroquia corresponde, pero estamos abiertos a que se pueda elegir», concreta el cura párroco. El Ayuntamiento ya está estudiando una nueva regulación del tráfico en el entorno del nuevo templo, así como la protección de las personas que acudan a las distintas celebraciones una vez que salgan del edificio. «Tenemos que tener en cuenta que va a haber una zona de salida de una iglesia donde se va a aglutinar gente y tenemos que garantizar la seguridad», comenta Juan García, concejal de Seguridad Ciudadana. En los últimos días, a la par que la empresa constructora y voluntarios se ocupaban de adecentar el interior y exterior del templo, las obras de asfaltado del Ayuntamiento también han llegado a algunas de las calles aledañas para que el entorno sea el más idóneo para la inauguración, a la espera de posteriores actuaciones.